Uno de los grandes retos a los que se enfrentan las empresas actualmente es el impacto que el estrés tiene en sus colaboradores y sus resultados. Es por eso que en esta nueva entrada de nuestro blog te hablaremos sobre la importancia de un adecuado manejo del estrés laboral.
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¿Qué entendemos por estrés laboral?
Cuando nos ponen en situaciones que nos rebasan, por ejemplo, pedirnos demasiado trabajo en poco tiempo, el estrés se disparará. Nos dolerá la cabeza, los hombros, nos sentiremos mal, además, de que nos veremos inundados por pensamientos negativos, por preocupaciones, miedo, estrés, etc.
A todo esto, se le conoce como estrés laboral. De acuerdo con expertos, podemos resumir que el estrés laboral es la respuesta a sentirnos abrumados y sobrecargados de trabajo, la cual reflejarse tanto de forma física como psicológica.
Como ya te podrás imaginar, el estrés laboral es causado por situaciones relacionadas con el trabajo como tener demasiados pendientes o no llegar a los objetivos establecidos. Como en todo, siempre hay niveles de estrés tolerables, pero, cuando estos tienden a tener un impacto físico, podemos decir que eso ya no es saludable ni positivo.
Consecuencias de un mal manejo del estrés laboral
Tener un manejo del estrés laboral puede derivar en consecuencias como:
- Problemas de salud físicos: Un exceso de estrés puede llevarte a problemas de salud, desde los más leves hasta los más graves. Dolor de hombros, de espalda o de cabeza son algunas señas físicas de estrés. Infartos, defensas bajas, derrames cerebrales, etc. Son ejemplos de enfermedades causadas o potencializadas por el estrés.
- Problemas psicológicos: Nuestra salud mental también se ve afectada por el estrés, teniendo consecuencias como insomnio, preocupación, ataques de pánico o de ansiedad. Incluso podemos enfrentarnos a trastornos como la depresión.
- Problemas laborales: Por último, un manejo del estrés laboral también puede reflejarse en problemas de productividad y eficiencia. Cuando estamos estresados no pensamos bien, tomamos malas decisiones y no damos los mismos resultados. Esto puede comprometer la calidad de nuestro trabajo y el cumplimiento de objetivos.
Estrategias para un adecuado manejo del estrés laboral
Afortunadamente, siempre se pueden poner en marcha estrategias para un adecuado manejo del estrés laboral. ¡Estas son las principales!
Dentro del trabajo
Cultura organizacional
Aunque suene redundante, gran parte del estrés laboral es causado por el mismo trabajo. Es por eso que la cultura organizacional juega un papel muy importante en el manejo del estrés laboral.
Por ejemplo, tener acciones enfocadas al bienestar del trabajador con programas como el ejercicio o concientización sobre la salud mental pueden ayudar. De igual forma, conceptos tan simples como respetar los horarios de trabajo o tener plazos de entrega justos también son muy útiles.
Políticas del bienestar
Podría sonar populismo, pero el contar con políticas enfocadas al bienestar también puede ayudar con el manejo del estrés laboral. Actualmente, existe entre las principales empresas un sentido de urgencia sobre el cuidado del trabajador dentro y fuera de la organización.
Entre las políticas de bienestar más comunes está la reducción de la jornada de trabajo, el aumento de días de descanso o simples recesos o breaks. Incluso acciones tan simples como tener un espacio para salir a tomar aire pueden ayudar con ello.
Gestión de proyectos
El uso de la tecnología puede hacer la diferencia en el manejo del estrés laboral. Con programas como Monday o Asana es posible llevar un mejor control de los pendientes, su asignación a los colaboradores y los tiempos de entrega.
Con el uso de estar herramientas es posible solucionar errores tan simples como olvidar, asignar una tarea y tener que pedirla de urgencia. También es posible realizar proyectos colaborativos, lo cual puede ayudar a reducir la carga de trabajo y, por tanto, mejorar el manejo del estrés laboral.
Fuera del trabajo
Hábitos sanos
Fuera del trabajo, existen estrategias que pueden ayudarte a ti, como trabajador, en el manejo del estrés laboral. Por ejemplo, el tener hábitos sanos hace que la mente no se encuentre más vulnerable ante el exceso de trabajo.
Como ya te imaginarás, los hábitos sanos incluyen el dormir bien, comer sano, beber suficiente agua, cuidar el consumo de cafeína o no tener adicciones. El hacer ejercicio es otra de las estrategias efectivas para reducir la predisposición al estrés.
Recreación y desconexión
Según expertos, el estrés no sucede de un momento a otro, sino que surge de forma acumulativa conforme las situaciones abrumadoras van aumentando en cantidad o intensidad. Partiendo de dicho supuesto, una forma de manejo del estrés laboral es alejarse de las situaciones que lo causan.
Por ello es que los días de descanso son tan importantes, pues estos te alejan del estrés del trabajo. Incluso, si la cultura organización lo permite, se puede ir más allá. Por ejemplo, combinando descansos cortos en el trabajo con más días de vacaciones o de descanso en la semana ¡Un fin completo puede funcionar!
Aprender a poner límites
Al final, tú como persona o trabajador, tienes importante responsabilidad en el manejo del estrés laboral. Poner límites se vuelve algo muy importante, sobre todo, si el entorno donde trabajas es muy tóxico o abrumador.
Si tienes mucho trabajo, es muy importante ser claro y saber decir no cuando ya no puedes más con el trabajo o la presión. Incluso puedes apelar, por ejemplo, a tu contrato diciéndole a tu jefe que ese no, ese no es tu horario laboral o eso no te toca a ti.
El impacto de un adecuado manejo del estrés laboral
Ahora que ya sabes cómo llevar un adecuado manejo del estrés laboral, entenderás el impacto que esto tiene en una empresa. En primer lugar, y lo más básico, es un aumento claro y real en la productividad, eficiencia y cumplimiento de objetivos.
Pero, más allá de los números, el manejo del estrés laboral ayudará a tener trabajadores más felices y sanos. Su bienestar se reflejará en su calidad de vida, en su ausentismo, rotación laboral y, por supuesto, en la imagen que refleja la empresa como empleador.
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