Empleada doméstica despido injustificado una combinación de palabras que suele usarse mucho para buscar soluciones a este problema. Lo cierto es que, una de las particularidades de trabajar como empleada doméstica es que es muy difícil comprobar que has sido despedida sin razón.
Aunque, esto no quiere decir que no puedas explicarlo contando con la ayuda legal adecuada. Pero, antes de ello, es indispensable que conozcas cuáles son los inconvenientes que te puedes encontrar tratando de demostrar que tu patrón te ha dejado desempleada sin motivos.
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Empleada doméstica despido injustificado, ¿Por qué es una situación complicada?
Una de las principales razones por las que a una empleada doméstica se complica con un despido injustificado es por su informalidad laboral. Para explicarlo mejor, hay que entender que, culturalmente hablando, ser ama de casa no se considera como un trabajo “legal”.
Y aunque sí existe una manera de categorizar los pagos conforme a las actividades que hacen, este no deja de ser un trabajo informal. En pocas palabras, no tiene un vínculo legal o un contrato que respalde sus derechos.
Por lo general, la persona que adquiere este trabajo acuerda términos verbalmente, es decir, hablando con el empleador. Por esta misma razón, solo el patrón y el empleado pueden confirmar y desmentir dichos acuerdos. De esta manera, la situación de empleada doméstica despido injustificado se le hace muy en contra a la trabajadora.
Otro de los aspectos que le juegan en contra a las empleadas domésticas es la discriminación. Una gran parte de la población de amas de casa son personas vulnerables, y existe una latente predisposición hacia las personas de bajos recursos. Sin mencionar que tienen pocas posibilidades de mantener una demanda por mucho tiempo.
Entonces, ¿Cuáles son las alternativas para una empleada doméstica?
La combinación de palabras “empleada doméstica despido injustificado” no siempre tiene un mal final. De hecho, existen muchas maneras de proseguir con el reclamo.
Aunque, para ello, tendrás que confrontar al patrón, ya que este puede no comunicar la razón del despido, y hablar con él logrará esclarecer muchas cosas. Asimismo, tendrás que hacer lo siguiente:
- Recopila la mayor cantidad de pruebas: La tarea más ardua e importante, recolectar evidencia que indique que tu despido fue injustificado. Puedes presentar testigos, grabaciones, documentos (de haberlos) o recibos de pago.
- Presenta la queja ante la Junta de Conciliación y Arbitraje: La JFCA es una de tus mayores aliadas en este tipo de circunstancias. Al presentar la queja, conseguirás que se abra un caso y se revisen las pruebas. Si lograste reunir suficientes, y que logren probar que tienes razón, conseguirás la remuneración que mereces.
- Consigue asesoría legal: Bajo ninguna circunstancia intentes iniciar el proceso sin ayuda legal. Los expertos conocen muy bien la ley y pueden asistirte ante la JFCA.
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