Un documento fundamental para trámites relacionados con el pago de impuestos, declaraciones fiscales e incluso, para entrar a un trabajo es la cédula de identificación fiscal. Y es que dentro de esta encontramos datos del SAT importantísimos como el RFC.
A continuación, te contaremos qué es la cédula de identificación fiscal, cuál es la diferencia con otros documentos y cómo es que puedes obtenerla.
¿Planeas renunciar a tu trabajo?
Sea cual sea la razón, recuerda que te toca un finiquito.
¿Qué es la cédula de identificación fiscal?
La cédula de identificación fiscal es un documento emitido por el Servicio de Administración Tributaria (SAT) el cual contiene datos fiscales como RFC, domicilio, razón social, entre otros datos más. Todo dentro de un código QR registrado ante dicha autoridad.
De esta forma se vuelve mucho más fácil identificar y reconocer al usuario ante la autoridad tributaria. También vale la pena destacar que la cédula de identificación fiscal es usada tanto por personas físicas como por personas morales (empresas).
¿Para qué sirve la cédula de identificación fiscal?
El uso de la cédula de identificación fiscal está pensado para simplificar la realización de distintos trámites y procesos contables. Un ejemplo lo encontramos en el registro de trabajadores ante el IMSS, INFONAVIT y SAT cuando llegas a un nuevo empleo.
De igual forma, para las empresas, la cédula de identificación fiscal simplifica procesos como el alta de proveedores, la gestión de pagos o la facturación. Así ya no se tiene que enviar la información por separado pues ahora todo va integrado en un solo documento.
¿Qué datos contiene la CIF?
También conocida como CIF, la cédula de identificación fiscal de inicio tiene el dato más importante que cualquier contribuyente pueda tener: su RFC. Y es que debemos de recordar que el RFC es como tu CURP pues este permite identificar a cada persona física y moral dada de alta en el SAT.
Además del RFC, la CIF contiene datos relacionados con el contribuyente como su razón social, domicilio fiscal y régimen en el que tributa. Todo condensado dentro de un código QR el cual permite acceder a la información rápidamente. De igual forma, puede contener más o menos datos dependiendo de si la CIF es de una persona física o una moral como una sociedad o empresa.
El RFC y la CIF
De acuerdo con expertos en materia contable, el RFC es el génesis de la cédula de identificación fiscal pues sin RFC no puedes tener una cédula de identificación fiscal. Digamos que el RFC es tu clave de registro y la CIF es la credencial que lo avala y lo muestra.
Es por eso que el mismo SAT indica que para obtener tu CIF primero debes de inscribirte al Registro Federal de Contribuyentes. Una vez tengas tu RFC, ahora sí se puede emitir la cédula de identificación fiscal.
¿Es lo mismo la constancia de situación fiscal que la cédula de identificación fiscal?
Aunque podían parecer lo mismo, incluso en el nombre, ambos documentos son distintos. La cédula de identificación fiscal contiene tu RFC lo que te permite identificarte como contribuyente, ya sea como persona física o moral. Además, de que el documento solo cuenta con un QR que es donde están todos los datos.
Por otro lado, la constancia de situación fiscal está pensada para indicar cuál es tu situación ante el SAT, si estás registrado, cuál es tu régimen fiscal, etc. Por lo que contiene muchos más datos desglosados en todo el archivo. Aquí no es necesario leer ningún QR porque los puedes encontrar en el mismo documento.
¿Cómo obtener mi RFC?
Para obtener tu RFC solo sigue estos pasos:
- Entra a la página del SAT y busca la opción Trámites del RFC en la barra superior.
- En las opciones elige: Obtén tu RFC con Clave Única de Registro de Población (CURP).
- Captura los datos solicitados incluyendo tu CURP.
- Verifica tu identidad y seguridad del trámite con el código de verificación de la página.
- Revisa que todos los datos sean correctos.
- Ingresa tu correo y confirma el trámite.
Una vez finalices el trámite se generará un acuse donde encontrarás tu RFC, allí encontrarás la cédula de identificación fiscal y el QR también llamado código de barras bidimensional.
¿Cómo obtener mi CIF?
Para obtener tu cédula de identificación fiscal sigue estos pasos:
- En Google escribe: Descargar cédula de identificación fiscal
- Abre el primer resultado de búsqueda asegurándose que sea la página del SAT.
- Da clic en ejecutar en línea.
- Allí identifícate con tu RFC y contraseña o con tu Efirma.
- Una vez ingreses, da clic en generar CIF.
- Después presiona en descargar y listo.
Recuerda que descargar tu cédula de identificación fiscal es un trámite totalmente gratuito. Solo necesitas de una computadora con internet para realizarlo.
Tu cédula de identificación fiscal en tu trabajo
En muchos trabajos, la cédula de identificación fiscal juega un papel importante. Esto debido a que es considerado como un requisito. Así como tu patrón puede pedirte tu INE, comprobante de domicilio, etc. La cédula de identificación fiscal también suele ser requerida para verificar tu estatus ante el SAT y usar los datos para darte de alta, por ejemplo, en el IMSS.
Por eso debes de contar con tu cédula de identificación fiscal. Toma en cuenta que de igual forma, en muchas empresas, suele solicitarse la CIF con menos de 3 meses de antigüedad. Esto con el objetivo de garantizar que los datos sean los más actualizados.
¿Y si me despiden sin motivos?
Si te despiden por cualquier pretexto, incluso que tu cédula de identificación fiscal es vieja ¡Ten cuidado! Ya que si los motivos de despido no son válidos por la ley, estás ante un despido injustificado.
No dejes que tu patrón abuse de su poder y exige tus derechos. Con nuestra ayuda, juntos podemos lograr que se te pague tu indemnización al 100%. De esta forma no solo exigimos que se cumpla la ley, también demostrarás que tus derechos valen mucho.
Solo escríbenos para conocer cómo podemos ayudarte en casos de despido injustificado.
¿Te despidieron sin motivos justos según la ley?
Entonces puedes demandar por despido injustificado a tu patrón.